La garrapata, un animalito de cuidado  

 

La picadura de una garrapata infectada por la bacteria  Borrelia burgdorferi, produce la Lyme enferemdad y su tratamiento es estrictamente a base de antibióticos, y si no es diagnosticada y tratada a tiempo puede ocasionar daños mayores en el organismo de los seres humanos, afectando su sistema nervioso, el corazón, las articulaciones, músculos, piel  y otros.

La garrapata que causa la enfermedad de Lyme es conocida como la garrapata de venado o ciervo, y se distingue de las otras porque esta tiene las patas negras, y se alimenta en la mayoría de los casos por roedores infectados con la bacteria. Por eso se debe hacer énfasis en que no todas las garrapatas son transmisoras de esta enfermedad.

Y aunque esta enfermedad no tiene distinción de condición social, raza, sexo, edad, son más propensos a que sean picados por estos animalitos las personas que habitan en los bosques, campos o están en contacto con las plantas, caza,  jardines o animales domésticos.

Una vez que una persona es picada por una garrapata infectada por la bacteria que produce la enfermedad del Lyme, por lo general máximo a los tres días se le observa una inflamación en el lugar de la picada y un enrojecimiento que va creciendo poco a poco y se forma una especie de diana de tiro al blanco, también es llamado ojo de buey, pudiéndose expandir a otras partes del cuerpo.

Además de afectar la piel también se puede presentar algunos escalofríos,  dolores en las articulaciones y musculares, neuralgias, altas temperaturas corporales, agotamiento físico, inflamaciones, adormecimiento de las manos y pies, otros.

En el mismo instante que comienzas a observar esos cambios en la picadura o a sentir todos esos síntomas debe acudir de inmediato a un médico, preferiblemente especialista en enfermedades infecciosas.  De lo contrario esta podría tornarse crónica y afectar el sistema nervioso, el corazón y las articulaciones.

 

La enfermedad de Lyme y su tratamiento

La enfermedad de Lyme debe ser tratada al instante de ser diagnosticada para evitar males mayores.  Una vez que se detecta la picada y esta comienza el proceso de inflamación se debe acudir al médico para que se le indique antibiótico por un tiempo prudencial que elimina la infección.

A todo paciente que llega picado por una garrapata infectada se le recomienda la desinfección del lugar donde se encontraba cuando fue picado por este animalito, con el propósito de erradicar la enfermedad  y evitar su propagación y volver a contraer la infección.